sábado, 27 de octubre de 2007

En la política argentina no todos son oportunistas trepadores con ambiciones de poder. Están también los lacayos serviles que dedican su vida y su honor para hacer el trabajo sucio de sus jefes.
Néstor Grindetti tiene 52 años y es empleado del clan Macri desde hace más de 25. Ingresó como cadete en Socma donde fue ascendiendo hasta convertirse en controller de Sideco, holding que manejaba las constructoras y empresas de servicios públicos del grupo. Actualmente preside la fundación “Creer y crecer” fundada en 2001 por Mauricio Macri y Francisco de Narváez.
Pero este personaje del riñón político de Mauricio, neoliberal ortodoxo y paladín de la lucha contra los ñoquis, no tiene un pasado impoluto.
“Grindetti, Néstor Osvaldo, s/estafa” es la carátula de la causa por defraudación y cohecho en la que se lo denuncia por sobreprecios en la construcción de la represa del arroyo Uruguaí, en Corrientes. La obra había sido presupuestada en 80 millones de dólares y terminó costando 300 millones.
Sin embargo, la lealtad es premiada y ya fue confirmado como Ministro de Hacienda del gobierno de PRO en la Ciudad de Buenos Aires y es el candidato a intendente de Unión-PRO en Lanús presentado como la “cara de la renovación de la centro derecha” a pesar de que Mauricio declarara que alguien sospechado de corrupción “no duraría ni cinco minutos” en un gobierno suyo.








Grindetti de campaña

Por Nahuel

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Lejos mi intención de tomar posición, defender partidos o ideologías políticas, cabe aclarar que todos somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario. Cualquiera puede ser imputado en una causa, incluso la persona más inocente del planeta. Me gustan mucho sus notas y sigan escribiendo q la gente las lee.
Saludos!

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